jadeante,
marcha el tren. El campo vuela.
[...]
Yo contemplo mi equipaje,
mi viejo saco de cuero;
y recuerdo otro viaje
hacia las tierras del Duero.
Otro viaje de ayer
por la tierra castellana,
¡Pinos del amanecer
entre Almazán y Quintana!"
marcha el tren. El campo vuela.
[...]
Yo contemplo mi equipaje,
mi viejo saco de cuero;
y recuerdo otro viaje
hacia las tierras del Duero.
Otro viaje de ayer
por la tierra castellana,
¡Pinos del amanecer
entre Almazán y Quintana!"
Aula del Instituto de Baeza donde impartio sus clases Machado
"Una tarde parda y fría
de invierno. Los colegiales
estudian. Monotonía
de lluvia tras los cristales."
|
Comedor de la pensión de doña Luisa Torrego en Segovia, donde vivió el poeta, hoy casa-museo |
"Oh soledad, mi sola compañía,
diste a mi voz que nunca te pedía!,
responde a mi pregunta: ¿con quién hablo?"
"Españolito que vienes
al mundo, te guarde Dios.
Una de las dos Españas
ha de helarte el corazòn."
"Cerca de la frontera los chóferes de las ambulancias que nos conducían nos dejaron en medio de la carretera, sin maletas ni dinero, al entrar la noche en un alto acantilado cerca del mar en medio de la muchedumbre que se apretujaba. El frío era intenso. Llovía abundantemente. La madre de don Antonio, de 88 años, con el pelo calado de agua, era una belleza trágica.” Lo narró el filósofo Joaquín Xirau, que viajaba con los Machado.
Una de las dos Españas
ha de helarte el corazòn."
Carretera hacia la frontera francesa por Port-Bou |
Tumba del poeta y su madre, que murió dos días después, en el cementerio francés de Collioure |
"Y cuando llegue el día del último viaje
me encontraréis a bordo ligero de equipaje,
casi desnudo, como los hijos de la mar."