Notas (7) acerca de "VIAJE A LA HISTORIA": posguerra y modernización

Posguerra en Cármenes, provincia de León. Una anciana muestra una vieja fotografía de los guardias civiles en el pueblo, en los años 40. “El franquismo se manifestó desde el principio como un régimen impermeable a la compasión y con una extraordinaria tenacidad para la venganza. Guardias civiles y falangistas –también el clero, salvo contadas excepciones–se establecieron en los pueblos como un ejército de ocupación que administraba las represalias con el propósito de exterminar la semilla roja.” (Secundino Serrano)


El “600”, símbolo del desarrollismo de los '60, en el carnaval de Badajoz. “El desarrollo será la gran mercancía política del régimen y la subida de la renta per cápita el gran objetivo nacional. [...] El franquismo trató entonces de ser el régimen del crepúsculo de las ideologías, confiando en que la clase obrera o los nacionalismos vasco o catalán relajarían sus puños en cuanto el dedo del dólar acariciase sus nóminas. [...] La bonanza económica creó una sociedad materialmente satisfecha, pero al mismo tiempo desató entre algunos españoles el anhelo de una verdadera libertad política, social y sindical. [...] A la larga, el bienestar se hizo subversivo.” (F.García de Cortázar)


Familia del barrio de El Carmelo. Barcelona. Fruto del despoblamiento rural, en 1970, 1.600.000 andaluces vivían fuera de Andalucía, de ellos 712.000 en Barcelona. Entre 1951 y 1975, el país vasco había recibido 570.000 inmigrantes. Madrid había pasado de 2.259.000 habitantes en 1960 a 3.180.941 en 1970. De estos, casi dos millones no eran madrileños. [...] Unas 650.000 personas emigraron a Barcelona entre 1961 y 1970 [...]. En 1970, el 49% de la población de Barcelona era procedente de fuera.” (Juan Pablo Fusi)


Inmigrantes en el barrio de Lavapiés, Madrid. Tal vez las palabras del escritor mozambiqueño Mia Couto sirvan para todos los que han tenido que dejar su tierra empujados por la necesidad, emigrantes en cualquier tiempo y lugar. “Preguntado sobre su raza, respondió: -Mi raza soy yo. Juan Pajarero, invitado a explicarse, añadió: -Mi raza soy yo mismo. La persona es una humanidad individual. Cada hombre es una raza, señor policía. (Extracto de las declaraciones del vendedor de pájaros).”


Museo Guggenheim Bilbao. Un edificio de titanio y cristal, inaugurado en 1997, ha venido a sustituir, junto a la ría, a las viejas instalaciones industriales. “Como es sabido, en la Edad Media, para que una ciudad se hiciese próspera, había que descubrir un hueso de un santo y construir alrededor una catedral. Los príncipes de hoy ya no construyen iglesias, sino museos de arte contemporáneo.” (Christian Boltanski)